KLIMTA

A ROOM OF MY OWN

Saturday, October 14, 2006

BOSQUE DE FANTASÍA


Acabo de ver en mi sobremesa de sábado una entrevista, que tenía grabada, a Ana María Matute. Ha sido una tertulia entrañable, me resulta una mujer tierna, sensible pero muy fuerte. Menuda vida ha llevado esta mujer por querer ser escritora, por ser mujer separada, y sobre todo por tener toda esa imaginación en la cabeza que hacen que sus relatos te abran las puertas a otros mundos, a soñar, a poder evadirte y vivir ajena a realidades que no te apetecen vivir o recordar.
Cuando ingresó en la Real Academia Española de la Lengua pronunció un bonito discurso en el que sobresalió su particular defensa de la fantasia, de la imaginación, don que no todo el mundo posee.


Toda la vida de un bosque –misterioso, atractivo, terrorífico, lejano y próximo, oscuro y transparente– encontraba su lugar sobre el papel, en el arte combinatorio de las palabras. Jamás había experimentado, ni volvería a experimentar en toda mi vida, una realidad más cercana, más viva y que me revelara la existencia de otras realidades tan vivas y tan cercanas como aquella que me reveló el bosque, el real y el credo por las palabras.Allí aprendí que la oscuridad brilla, más aún, resplandece; que los vuelos de los pájaros escriben en el aire antiquísimas palabras, de donde han brotado todos los libros del mundo; que existen rumores y sonidos totalmente desconocidos por los humanos, que existe el canto del bosque entero, donde residen infinidad de historias que jamás se han escrito y acaso nunca se escribirán. Todas esas voces, esas palabras, sin oírse se conocen, en el balanceo de las altas ramas, en la profundidad de las raíces que buscan el corazón del mundo. Allí presentí y descubrí, minuto a minuto, la existencia de innumerables vidas invisibles, el rumor de sus secretos comunicándose de hoja en hoja, de tallo en tallo, de gota en gota de rocío, conducidos a través del bosque por los diminutos habitantes de la hierba.